Terapia Familiar

Mejora tus relaciones y trabaja en el origen de los conflictos

family 457235 1280La Terapia Familiar es una forma de tratamiento psicológico destinado a ayudar a las familias y dotar de recursos a las personas con relaciones cercanas de parentesco para que puedan ayudarse entre sí. Las dificultades emocionales de un miembro de la familia en ocasiones son el reflejo de un conflicto o un problema de comunicación. Se trata de promover el desarrollo de las personas dentro del sistema familiar, y modificar pautas disfuncionales de relacionarse que generan sufrimiento.

La Terapia Familiar no implica necesariamente que tenga que acudir toda la familia a la consulta, se trabajará principalmente con las personas que solicitan la ayuda, cuyos cambios influirán indirectamente en todo el sistema. No siempre es precisa la participación de todo el grupo familiar. El terapeuta orientará en la manera de motivar a los miembros de la familia en efectuar cambios de comportamiento.

Situaciones frecuentes en Terapia Familiar:

familia

  • Conflictos padres-hijos, pautas de crianza y desarrollo infantil, berrinches, rabietas, hábitos y valores que se transmiten a los hijos, desarrollo de instrumentos para una educación consciente.
  • Problemas de comportamiento de niños y adolescentes: Desobediencia, falta de límites, problemas con los estudios, agresividad, etc.
  • Transiciones vitales y cambios críticos: enfermedad grave, muerte de familiares y duelo, situaciones imprevistas de desempleo, jubilación, «nido vacío», abandono, discapacidad, accidentes.
  • Adicciones, trastornos alimentarios o psicosis en un miembro de la familia.
  • Conflictos y violencia familiar.
  • Familias monoparentales y reconstituidas, adaptación a la convivencia y a la nueva situación.
  • Envejecimiento: cuidado de mayores y afrontamiento del estrés del cuidador.
  • Dificultades en la toma de decisiones importantes que implican a toda la familia.

Cuándo puede ayudar la Terapia Familiar

Si la familia está experimentando uno o más de los siguientes problemas, puede ser el momento de considerar la posibilidad de buscar ayuda profesional.

  • Los miembros de la familia tienen dificultades para funcionar de forma normalizada. ¿Sientes que hay un cansancio o «pérdida de energía» en la familia? ¿Las cosas que solían ser rutinarias y normales ahora son una carga, o se ponen muy difíciles?
  • Los miembros de la familia tienden a tener reacciones emocionales extremas. ¿Los miembros de tu familia presentan una excesiva rabia, miedo, tristeza, depresión u otras reacciones emocionales?
  • Existe una ruptura significativa en la comunicación entre los miembros de la familia. ¿Te resulta más difícil comunicarte de lo habitual? ¿Estás experimentando el  silencio, desprecio o irritabilidad con más frecuencia de lo habitual?
  • Los miembros de la familia se están apartando de la vida familiar. ¿Existe un patrón de aislamiento o distanciamiento en uno o más miembros de la familia?
  • Hay señales de hostilidad o amenazas de violencia hacia uno mismo o hacia otros miembros de la familia. Más allá de los roces normales, ¿crees que la violencia está presente? ¿Existen conductas que se considerarían «agresión» si no fuera entre miembros de la familia?
  • Los miembros de la familia expresan sentimientos de impotencia o desesperanza. ¿Sientes que se ha agotado tu paciencia? ¿Hacer frente al estrés en casa se esta poniendo insoportable? ¿Te estás preguntando si tu familia se recuperará algún día?
  • Ha habido cambios en el comportamiento de los niños en el hogar o en la escuela. ¿Están cayendo en picado las calificaciones? ¿Hay problemas de asistencia o comportamiento perturbador en la escuela ? ¿Alguno de los niños está fuera de control en casa?
  • La familia ha tenido una experiencia traumática y estáis teniendo dificultades para sobrellevar la situación. ¿Ha habido una muerte-duelo en la familia? ¿Un divorcio o una separación? ¿Se ha descubierto una infidelidad? ¿Tiene la familia dificultades para adaptarse a la nueva realidad como familia reconstituida?
  • Los miembros de la familia tienen problemas de abuso de sustancias. ¿Existen abusos en el consumo de alcohol o drogas? ¿Hay algún miembro de la familia con un trastorno alimentario?

Estructura de la Terapia Familiar

Entre los objetivos y procesos de la Terapia Familiar, podemos incluir:

  • Explorar cómo los miembros de la familia interactúan entre sí.
  • Identificar y tratar patrones de comunicación desviados y disfunciones en el sistema familiar.
  • Descubrir y fomentar las fortalezas y los recursos de la familia.
  • Dotar a la familia de habilidades para la resolución de problemas.

La Terapia familiar puede combinar sesiones individuales, sesiones de pareja o conjuntas con otros miembros de la familia, según se considere a partir de la evaluación clínica.

Evaluación Inicial

Durante la primeras sesiones, el terapeuta indagará sobre el tema que trae a la familia a la terapia, y le dará a cada persona la oportunidad de hablar sobre cuáles cree que son los principales problemas que la familia está enfrentando y por qué. Recopilará información para construir una imagen de la familia y cómo funciona, que incluye:

  • Historia familiar
  • Roles familiares
  • Formas de crianza y disciplina, estilos de apego
  • Habilidades de afrontamiento de la familia

El terapeuta va a evaluar las crisis que ha atravesado la familia y cómo se afrontaron en grupo e individualmente, y te puede pedir que pienses y escribas sobre quién tiene poder en la familia y cómo se toman las decisiones. Algunas veces es útil adoptar un enfoque estratégico en la terapia familiar, y se puede descubrir cómo el problema que os trajo a la terapia cumple una función específica en la familia.

Mapa familiar y plan de tratamiento

Otras veces el terapeuta puede utilizar un enfoque estructural, y el siguiente paso podría implicar que el terapeuta cree un mapa que explique la jerarquía de la familia. El mapa puede ayudar a describir cómo funciona la autoridad y los límites en tu familia, incluidas las formas en que puede estar cambiando con el tiempo.

Es importante destacar que el terapeuta siempre va a estar más interesado en ayudar a resolver problemas que en culpar o averiguar quién es el/la responsable de todo. Trabajando juntos, tú y el terapeuta seguramente acordaréis un plan que describa lo que tú mismo/a y cualquier miembro de tu familia que participe en la terapia, podéis hacer para cambiar la comunicación no saludable, la expresión emocional inadecuada y aprender tácticas de resolución de problemas. El plan de tratamiento también puede incluir maneras de potenciar los puntos fuertes específicos de la familia.

La terapia familiar no necesariamente resolverá todos los conflictos de la familia, pero puede ayudar a desarrollar habilidades de afrontamiento más saludables y formas más productivas de comunicarse.

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